sábado, 30 de agosto de 2008

yo no me toco, yo compro.

tantas veces...cenábamos y charlábamos con amigas, yo no era la única que al momento de hablar de sexo, me desaforaba en un tema que me interesa mucho...en un tema que me gusta vivir.
pero si, creo...yo era casi la única al sincerarme y decir que no...que si no había otra persona para compartir el sexo...no había sexo esa vez.
pensaba que para disfrutarlo...no existía posibilidad de "autocomplacencia".
sola? hacerlo sola?
entonces...luego de un tiempo...fuí...al lugar indicado...yo no me toco, yo compro.

hoy entré a un sex-shop.
sí, así...como quien pasa por la panadería y pregunta con toda la curiosidad acerca de la variedad de dulces para comprar...
entré y empecé a ver la mercadería.
sí...varios consoladores de tamaño muy grande y de color negro me dieron terrible miedo...
simpatía me causaron las maripositas...así como copiaría un vestido de alguna modelo de la tele...copiaría las maripositas tantas veces vistas en la serie "sex & the city"
habitual a curiosas animándose a conocer, me pareció la actitud de la y el vendedor...les dije un poco risueña, al entrar: -preparados para que entre cualquiera...???
preparados y mas...porque ambos...por separado y en algún momento en el que miraba yo, las vitrinas y leía las explicaciones para usos múltiples de diferentes juguetes" se ofrecieron a ayudarme en privado a utilizarlo...
del hombre no me extrañó, hacía calor, yo tenía una remera muy escotada, no podía ocultar mis semejantes pechos que en des huso concideraba yo por el tiempo sin sexo que llevaba...y que me había llevado ahí...
de la mujer...no me sorprendió...pero no termino de acostumbrarme a que estos dos semejantes pechos también gusten a "hembras"
igual...salí del negocio en cuestión, sin comprar...pero con la intención de seguir ahondando en el tema de comprar algo en algún momento mas decidida...

caminé por la galería, creo que un poco silbé o susurré...y me fuí convencida...oferta nunca falta, no era necesario comprar nada...tocarme no iba a hacerlo no lo quería hacer antes y nada había pasado para hacerlo ahora...
me detuve unos negocios después, no silbé, me callé...
y sentí en la espalda, esos fríos escalofríos...
había salido del negocio a aclararme por las dudas que no me haya quedado claro...su ofrecimiento para conocer la mercadería del negocio...

No hay comentarios: