acostumbrada a lagrimear por casi todo y también sentir mas grandeza por mi persona diciendo que lo mejor es "hasta llorar de emoción por las cosas buenas", volví a escuchar una pregunta, esa pregunta que en tres oportunidades de mi vida me habían hecho...
la pregunta se repitió en las tres mejores situaciones para mí, una mujer que no se achica justo en el lugar hasta el que deseo llegar.
entre los diarios de un invierno, hoy bastante lejano; lejano en tiempo, lejano en persona y lejano...lejanisímo en sentimiento...
enredada en las sábanas, que sabiendo compartía con otra mujer, acepté una y otras veces, por un tiempo volver a usar...
jugando con el tiempo, con las telas y dando vuelta una y otra vez el cartelito de "cerrado, vuelvo en 15'"
bastantes años...y después de no recordarlo...volví, de casualidad a escuchar esa pregunta, que en cierta forma, comienza por una afirmación de la otra parte...que en ninguno de los tres caso, fué hecha por mi...
-para mí, el amor...enamorarme, es una fortaleza; no una debilidad. ¿para vos?
la primera vez, me reí...y te expliqué que esto era una cuestión que no tenía ni principio ni fin para mí...
la segunda vez, lloré...bastante me costó sentir que había llegado hasta un lugar de mi corazón que por primera vez visitaba...nos desentendimos, y no contesté...acaso, fué la emoción mas transparente que viví...y que sacó afuera la parte mas vulnerable de mi...salió todo...yo liberé...no especulé...nada...y...
la tercera, no supe responder. no deseaba, no imaginaba, no sentía que así...de tan de repente...me hicieras esa pregunta...no responderla fué también parte de la imagen que no quise dar...de la imagen con la que no quise que te quedes...de la que ahora me está costando volver...
esta cena, que no fué tensa, no fué distante, no fué fría...fué sí, la respuesta sin que me lo preguntes. todavía no sé, o por ahora pienso que enamorarme de vos es una debilidad, es sacar toda esa parte vulnerable que no puedo sostener y que se siente presa porque le cuesta salir...inmanejable, sentimiento que los últimos días siento que también vivía en mí y que no había salido...
la parte lagrimear, queda para esas emociones que poco tienen que ver conmigo...son para las cosas bellas y no tan bellas que los demás comparten...y que como no son mías...se conectan con toda la otra que si fuera mía, esa que se siente encerrada y prohibida...
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